Como una de las calles que tiene su origen, desde que se fundó Durango, pues esta sale precisamente del lado oeste de la Catedral, hacia el norte, ya que era la salida, rumbo a La Sauceda, Canatlán y San Juan del Río, a la vez de la entrada principal a la ciudad, pues las calles que daban más al rumbo por donde sale el Sol (este), se inundaban por las sequías de agua que desembocaban por ahí y eran un lodazal.
Después de los 1700 se le llama Calle Santa Ana por la ermita del mismo nombre, ahora iglesia enfrente del Jardín Hidalgo, para posteriormente llamarla Calle Constitución, un “poco después de la venida de Juárez a Durango”, en honor a la nueva Constitución de 1810.
Ahora en una de las más dramáticas transformaciones que jamás se le haya dado a esta vía , la Calle Constitución después de ocho meses, se convierte (no precisamente de la noche a la mañana), en polo de desarrollo a nivel local, como detonante del Centro Histórico y como culminación del remozamiento al mismo.
Para su metamorfosis, fue preciso levantar tanto banquetas, como pavimento viejo, arreglar todos los servicios de agua y drenaje subterráneos, inclusive de bajar el cableado de la red eléctrica, de teléfonos y de servicio de tv por cable, para dejar libre de alambres el cielo de la calle.
En una cuantificación de las obras, tenemos que se cambiaron 560 metros de tubería para el agua, 4,200 mts. cuadrados de concreto estampado, 2,000 mts. cuadrados de banquetas, además de instalar una nueva iluminación, palmas, macetones, depósitos de basura y bancas, todo al estilo de época y propia de este tipo de calles peatonales.
Fue en punto de las siete y media de la tarde del 30 de Noviembre, cuando en un ambiente festivo, al cual asistieron gran número de conciudadanos; nuestro Gobernador Constitucional C. Ismael Hernández Deras, acompañado de su señora esposa Gabriela López de Hernández, el Alcalde de la ciudad Carlos Matuk y otras distinguidas personalidades, cortó el listón y dio por inaugurada la calle que aun conserva su nombre de “Constitución”.
Es en primer lugar, increíble el dinamismo con que se ha trabajado en Durango desde el principio de la presente administración de Ismael, que gracias a una inversión (segundo lugar) para infraestructura muy considerable, se pudo remodelar el Centro Histórico de la Ciudad, hasta que hoy por hoy, podemos decir sin temor a equivocarnos, que poseemos el Centro Histórico Colonial más bonito e impactante de todo el norte del país.