En el inicio de 1563 Alonso de Pacheco fue encomendado para trazar la Capital de lo que seria la Nueva Vizcaya ahora nuestro Durango, eligiéndose desde entonces el lugar donde estaría nuestra Plaza de Armas.
Un poco más tarde de ese mismo año en julio 8, el Capitán Francisco de Ibarra funda oficialmente la ciudad al parecer en la esquina de la Plaza de lo que son ahora las calles 5 de Febrero y Juárez.
Esta hermosa plaza con su kiosco de cantera rosa, flanqueada por tres de sus lados con edificios de época, algunos de ellos de los recientemente remozados, colinda en su lado norte con nuestra imponente Catedral.
Aun cuando la ciudad ha crecido y lentamente somos cada dia menos provincia, la Plaza no pierde su encanto y es visitada por cientos o quizás miles de personas cada día, en especial en Domingo cuando aquello se vuelve un verdadero carnaval. No te lo pierdas.