El 1 de agosto de 2010 la UNESCO declaró el “Camino Real Tierra Adentro” Patrimonio de la Humanidad, el mismo representa más de 2500 Km. que cruzan desde la ciudad de México, el centro y el noroeste del país para internarse en los ahora Estados Unidos de Norteamérica y llegar hasta Santa Fe Nuevo México. Por el momento y más que nada por premura del tiempo se declararon 1600 km, sólo hasta el Valle de Allende en Chihuahua. De hecho estuvieron un grupo de no menos de 15 personas entre arquitectos, dibujantes, fotógrafos, historiadores y arqueólogos trabajando desde el 2008 para la integración del expediente técnico del proyecto y en un principio fueron los únicos que aquilataron la real valía de este trascendental hecho.

Ahora que en conjunto con la vía, se incluyeron 60 sitios de suma importancia en la declaración y a Durango se le reconocen 19 de estos espacios o inmuebles en los casi 500 km. que quedan declarados dentro del Estado.

Es importante mencionar que está pendiente la composición del Plan de Manejo para adjuntarlo a la Declaratoria del “Camino Real Tierra Adentro” y precisamente este pasado 21 de febrero, se llevó a cabo por invitación de nuestro Gobernador Jorge Herrera Caldera, la Primera Jornada de Planeación del Camino Real de Tierra Adentro, donde con la participación de Aguascalientes, Chihuahua, obviamente Durango, Zacatecas, Querétaro, Guanajuato, San Luis Potosí, Estado de México, Jalisco y Ciudad de México, quedaron integradas las comisiones para continuar el trabajo.

La tarea va a ser ardua y tomará algo de tiempo, pero no cabe duda que esta declaratoria para el Estado de Durango va a ser de gran beneficio pues conlleva una publicidad tremenda, una por parte de la UNESCO donde va a aparecer Durango en toda la papelería y sitios Web de esta oficina mundial, en varios idiomas, otra es que la promoción de Durango se va ir ahora sí que de “aventón” en también toda la folletería y videos, etc., que se produzcan del Camino Real Tierra Adentro tanto de la SECTUR como de CONACULTA a nivel nacional. Obviamente esto va a atraer turistas, no a cualquier turista sino uno más refinado y especializado en temas de cultura y aventura, pues los 19 sitios designados no son todos como el Centro Histórico de la Ciudad sino que algunos son pueblitos, haciendas e inclusive solo una construcción antigua en una paraje solitario o un tramo del apenas visible mencionado camino y esto va ser un gran apoyo para la gente del campo, para la diversificación de los productos del campo, pues obviamente después de capacitaciones y adecuaciones de infraestructura, se van a necesitar guías, veladores, gente de mantenimiento, pequeños hoteles, restaurantes, etc.

Pero para nosotros, gente común con algunos gustos que nos incita la curiosidad, más que nada aun cuando apreciamos el trabajo que muchos han brindado un tanto desinteresadamente para hacer posible esta maravilla, lo que más nos interesa son los lugares en sí, es poder ir poco a poco pues tiene uno otras cosas que hacer, visitando estos parajes y tratar de imaginarnos como serían esos tiempos del virreinato ahora antiguos y lejanos, sin embargo, todavía podemos rescatar algo de su historia con esta huella que dejaron, ya sea en una iglesia o hacienda, solamente un lugar y vamos a tratar de imaginarnos cómo eran a través de ahora si lo que nos quedó de estas épocas pasadas.
En primer lugar, es necesario decir que aun cuando el Camino Real Tierra Adentro más o menos inicia en 1598 y por decir “inicia” queremos dar entender que se empezaron a mover mercancías como telas, herramientas, químicos para las minas, etc., en grandes carretas de dos y cuatro ruedas de madera muy rústicas, tiradas en un principio por 2, 4, 6 y hasta más bueyes (no se equivoque con gueyes) y luego un poco más después con mulas de hasta 10 pares, en realidad esta ruta es pero mucho más antigua que eso.

Vamos a pensar la época pre-hispánica o precolombina, la Américas del norte centro y sur, estaban habitadas por civilizaciones de indígenas bastante cultos a su manera y otros de plano medio brutos pero que también tenían la necesidad de transportar bienes del sur al norte y viceversa, los comerciantes indígenas también caminaban por los caminos, tenemos bastantes pruebas de ello como los aretes de cobre de las gentes Hopi y Navajos en el norte y la turquesa, plantas medicinales y para rituales, pieles, plumas y otras en el sur, por rutas que se regían por la presencia de un elemento importantísimo totalmente común necesario tanto en hombres como en bestias, que es el agua, (el agua es vida).

En el tiempo de los indígenas por miles de años antes del contacto, a este se le medía a la velocidad de hombres a pie en un camino interconectado por manantiales o tinajas en arroyos de agua limpia y cristalina para tomar, no había otra y luego después cuando llegaron los europeos, no fue más que lo mismo en casi el propio camino, sobre los ojos de agua parecidos, sólo que a velocidad de paso de caballo, bueyes y mulas pero con la idéntica agua que brotaba de los lugares donde lo había estado haciendo por milenios.

Así que todo lo anterior fue para decir que el camino ya estaba, quizás no era tan ancho como para que rodaran las carretas pero en su mayoría ya estaba y en un principio los ingenieros fueron los indígenas, después ahora si en 1598 se empezó a usar el camino real para mover carga pesada y se empedró e hicieron su trazo con ángulos menos agresivos, además de hacerlo de tal forma que pudieran por su ancho pasar las ruedas de las carretas, también se le hicieron puentes como el del “Diablo” en Durango para pasar los ríos y en los aguajes se hicieron hostales y presidios para pasar la noche, cambiar de remuda y tomar agua.

Estos puntos se puede decir que eran como las gasolineras de ahora en día pero de hace mucho, la gasolina de los animales era la paja y el agua y en el hostal los hombres también recargaban energía haciendo lo propio con la gastronomía colonial, pero la distancia entre uno y otro lugar lo marcaba, por un lado, la seguridad del agua (siempre tenía que haber), la física protección contra las tribus hostiles y por cuanto podía caminar un buey en un día o sea la jornada, que no era mucho unos veinte kilómetros diarios.

El Camino Real Tierra Adentro entraba a Durango, o más bien a la Nueva Vizcaya, bajando por el Ojo de Agua del “ Calabazal” o Villa Insurgentes hacia Vicente Guerrero que inclusive en esos tiempos se llamaba Hacienda de Muleros, pues aquí cambiaban de remuda o mulas los arrieros para las carretas. No muy lejos de ahí, estaban y sigue estando el pueblo de Súchil y la Hacienda de Morteros, pero el camino continuaba para llegar a la Hacienda de San Antonio de Juana Guerra que era una propiedad que le adjudicaba el cabildo de Nombre de Dios a esta desde 1586, fecha un tanto anterior a 1598 que se menciona como el inicio del Camino Real o sea que este ya funcionaba desde antes.

La hacienda de Juana Guerra, como más se le conoce, es el primer sitio en Durango que se menciona en la Declaración de la UNESCO, esta contaba precisamente con un enorme ojo de agua que hasta la fecha subsiste y es seguro que en ella se encontraba posada para pasar la noche y descansar los animales, a la fecha la misma con su fachada y una hermosa capilla según por ahí de los 1700, están situados a un lado de la Carretera Federal no. 45 Durango Zacatecas, en el entronque hacia Poanas llamado Amado Nervo y muy bien puede uno parar a disfrutarla, tomar el aire y algunas fotos del inmueble, para después continuar a Nombre de Dios fundado el 3 de junio de 1562, el segundo de los 19 sitios mencionados como Patrimonio de la Humanidad y parte del Camino Real Tierra Adentro, pero esta historia la vamos a dejar para el próximo número del Boletín. Entre tanto por ahí nos vemos.